Nada más conocer la historia de una niña de escasos recursos del municipio de Siachoque, en Boyacá, la Policía Nacional de Colombia puso manos a la obra para intentar ayudar a la familia para mejorar su situación de precariedad. Los uniformados la ‘apadrinaron’ (junto a otros siete integrantes de la comunidad). Todos recibieron enseres, electrodomésticos y elementos de la canasta familiar. De igual manera, colaboraron a la menor, quién sufre problemas de salud, gestionando citas con médicas especialistas para prestar la atención necesaria y darle una mejor calidad de vida.
Los policías vienen acompañando a esta menor a los controles médicos, para los cuales deben trasladarse desde Siachoque hasta Tunja, donde es valorada y atendida por los profesionales de la salud que están ayudando en este proceso.
Se han dispuesto dos uniformados, profesionales en psicología, para esta misión, los cuales orientan el trabajo psicosocial con los padres, hermanos y demás integrantes del núcleo familiar de la menor, mejorando la parte afectiva y emocional de estas personas.
Estas acciones evidencian el trabajo con nuestros niños, niñas y adolescentes, en los cuales enfocamos nuestras capacidades institucionales para garantizar la seguridad y la protección de los menores.
